jueves, 7 de febrero de 2013

Capítulo 17


Al cabo de un rato, Doug volvió a aparecer. Traía una caja bastante grande. Se sentó a mi lado y depositó la caja en el suelo. Quitó la tapa y me dejó ver lo que había dentro. Dougie sacó lo que parecía ser un álbum de fotos. Me lo entregó y esperó.
  • ¿No decías que tu pasión era la fotografía? Pues tu abuelo y tú compartís la misma pasión y aquí tienes una pequeña muestra de lo que logró hacer.

Empecé a pasar las hojas, había una fotografía en cada página. En las primeras salían Doug, Danny y Harry con unos diecisiete años. ¡Qué jovencitos! No eran fotos muy buenas artísticamente hablando, pero transmitían mucho.

A medida que pasaba las hojas, se veía la evolución de los chicos. Mi abuelo pasaba de ser una bola que solo quería comer, a un chico muy guapo que llevaba unas camisetas que mi hermano Tom adoraría. Doug parecía ser el más pequeño de todos. Había alguna foto que parecía un niño al lado de los otros tres. En varias fotos aparecía con un piercing en el labio. No era el típico chico del que me hubiera enamorado, pero a mí siempre me habían gustado los piercings y los tatuajes, y mi tío, de joven, tenía las dos cosas. Me ruboricé por aquellos pensamientos y seguí pasando las hojas. Harry y Danny también habían cambiado mucho desde sus inicios. Pero lo que no había cambiado era que los dos tenían unos ojazos impresionantes. Seguí viendo las fotos y vi que empezaban a salir los chicos con las que supuse que serían sus novias. Había muchas fotos de mis abuelos. Mi madre se parecía mucho a mi abuela cuando era joven. Era tan guapa y se le veía tan feliz al lado de mi abuelo. Después de estas fotos se terminó el primer álbum.

Miré a mi tío y éste me pasó el siguiente. Las primeras fotos eran de paisajes muy bonitos. Aquí, ya se empezaba a notar la mejoría de mi abuelo con la cámara. Y cuando pasé unas cuantas páginas vi una sección que solo había gatos.

  • Ese de ahí es Marvin – dijo señalando una foto de una gato persa con unas gafas de sol. – Y esa de ahí es la princesa Leia - ¡qué bonita era! Me encantaban los gatos blancos con manchas negras. Era preciosa. – Y esa gata que ves sobre mis piernas, es la princesa Aurora. Es a la que más cariño cogí.

Definitivamente, Aurora era la gata más bonita que había visto hasta ese momento. Se parecía mucho a Leia, pero en la cara no tenía ninguna mancha negra, la tenía en la oreja izquierda y en la cola. Y sí, se notaba que había congeniado con mi tío. Eran tres gatos muy bonitos y se veía que les cuidaban y querían mucho. Había una foto que salía mi abuela besando a Leia. Me emocioné al ver esa foto, era preciosa.

Seguí pasando las hojas y las fotos variaban mucho. Había de mi abuelo y sus amigos en conciertos, de Doug con el bajo, de Harry en la batería y de Danny poniendo caras raras. Me reí con las siguientes fotos. Salían los cuatro y cada uno llevaba una placa de policía. Miré a Doug para que me explicara por qué tenían esas placas.

  • Es lo que tiene la fama, que te hacen regalos de todo tipo.

Terminé de ver el álbum y lo guardamos en la caja. Ya no había más. Mi abuelo había sido un gran fotógrafo. Ojala algún día pudiese ser como él.

  • Doug, ¿podría quedarme con las fotos? Si no puedo no pasa nada. Solo quería aprender un poco de él.
  • ¡Claro que sí! Aquí nadie les da uso, hace mucho que no salen del sótano. Eso sí, la próxima vez que vengas, tráete tu cámara, ¿vale?
  • Me parece bien.

Pero no pudimos continuar con la conversación. Mamá había entrado y me decía que ya era hora de volver a casa. Le di un fuerte abrazo a mi tío y un beso a mi abuela. Nos metimos en el coche y pusimos rumbo a casa.

Una vez llegamos, subí a mi cuarto con la caja que Doug me había dado. La abrí y saqué los dos álbumes. Empecé a verlos otra vez, había fotos realmente bonitas. Y después de estar un rato observándolas, se me ocurrió una idea para poder disfrutarlas al máximo. Las dejé en la mesa, me puse el pijama y me metí en la cama. Tenía que estar descansada para llevar a cabo mi idea.



Siento haber tardado taaaanto tiempo. Tengo dos capítulos más escritos y seguramente llegue hasta el 20 y ahí terminaré. No quiero que se haga eterno. Espero que os haya gustado y esas cosas.

¡Sed felices!